Domingo, 14 de julio de 2013. "Como en casa"
Los primeros rayos de sol empezaban a colarse por las rendijas de la persiana de la ventana, cuando los sones del trío de la marcha "Pasa la Virgen de la Macarena", de Pedro Gámez Laserna, tocada por la Banda de Música del Carmen de Salteras, melodía que tengo puesta en la alarma del móvil, comenzaron a sonar en la oscura habitación del hostal...
Y es que para mí, estos son los mejores acordes que pueden escucharse cada mañana al despertar. Así lo vengo haciendo yo desde hace varios años y así seguiré haciéndolo hasta el último de mis días en que ya no vuelva a abrir los ojos.
Y es que para mí, estos son los mejores acordes que pueden escucharse cada mañana al despertar. Así lo vengo haciendo yo desde hace varios años y así seguiré haciéndolo hasta el último de mis días en que ya no vuelva a abrir los ojos.
Como era domingo y la ruta de ese día era la más corta del viaje, decidí quedarme un "ratito" más en la cama descansando antes de bajar a desayunar. Hoy sin duda era una ruta especial, no por ser la penúltima del viaje, sino porque el final de etapa era en Olías del Rey, ciudad en la que residen mi hermano menor y mi cuñada... y es que estar junto a ellos, es sentirme como en casa.
Etapa nº 6: Cuenca - Olías del Rey (Toledo).
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| Plano de ruta |
- Distancia aproximada: 200 km
- Tiempo estimado (sin paradas): 3 horas 15 minutos
- Localidades de paso:
- Cuenca.
- Naharros.
- Horcajada de la Torre.
- Carrascosa del Campo.
- Alcázar del Rey.
- Paredes.
- Huelves.
- Tarancón.
- Belinchón.
- Fuentidueña del Tajo.
- Villarejo de Salvanés.
- Valdelaguna.
- Chinchón.
- Villaconejos.
- Aranjuez.
- Mocejón.
- Olías del Rey (Toledo).
- Altura máxima/mínima: 1180/464 metros
- Pendiente máxima subida/bajada: 9,2%/8,7%
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| Perfil de elevación |
Crónica resumida de la ruta:
No se si porque era domingo o porque todavía era muy temprano (09:00 horas), no me fue nada fácil encontrar una cafetería cercana al hostal donde poder desayunar, todas estaban cerradas a esa hora, así que tuve que alejarme un poco por una avenida cercana hasta encontrar una abierta, mejor dicho recién abierta.
Con más problemas de los deseados por culpa del gps (los mapas no estaban actualizados), salí de Cuenca pasadas las 10:00 horas, por lo que salvo una breve parada en Carrascosa del Campo para echar gasolina, hice de una sola tirada más de 120 kilómetros hasta llegar a Valdelaguna (Madrid), desistiendo de hacer la parada que tenía programada a pocos kilómetros de Tarancón para visitar la Ermita de Riansares.
El motivo que me llevó a programar la parada en la Ermita de Riansares, era casi exclusivamente para, además de visitar la ermita, disfrutar de las vistas de las praderas, alamedas y pinares de su entorno mientras descansaba, sin embargo como he dicho decidí continuar la ruta sin detenerme.
A la salida de Tarancón, tuve irremediablemente que coger por la autovía A-3 (E-901) hasta llegar a Villarejo de Salvanés, donde pude abandonarla para proseguir mi camino hacia Valdelaguna por la maltrecha carretera M-316.
Al llegar a Valdelaguna, me encontré con mucha gente en las calles, había tanta que parecía una gran ciudad, algo que me sorprendió mucho siendo un pueblo de menos de 900 habitantes. De repente me encontré que la calle por la que debía de pasar estaba cortada al tráfico por un vallado a lo largo de toda la calle, comprendí entonces que estaban celebrando algún encierro, así que no me lo pensé ni un segundo y busque un lugar donde aparcar la moto para poder ver el encierro.
Desgraciadamente había llegado demasiado tarde y acababan de finalizar, así que solo me dio tiempo a tomar un par de fotos antes de proseguir mi camino hacía Chinchón, a tan sólo 8 kilómetros de Valdelaguna.
En Chinchón volví a hacer una nueva parada para ver su Plaza Mayor, que en esta ocasión estaba dispuesta y preparada para los festejos taurinos.
De arquitectura popular, la Plaza Mayor es una plaza clásica de la Edad Media. Su forma es irregular y una estructura sencillas, con edificios de tres plantas, galerías adinteladas y 234 balcones de madera denominados "claros". Desde su construcción, en la plaza se han celebrado numerosas actividades: fiestas reales, corrales de comedia, corridas de toros, actos religiosos, políticos y militares, etc...
Desde la Plaza Mayor, también podemos ver la Iglesia de la Asunción y la Torre del Reloj. Siendo curiosa la historia que rodea a estos dos edificios, ya que por una parte la Iglesia de la Asunción nunca tuvo una torre campanario como cualquier otra iglesia y por otra parte la Torre del Reloj es lo que queda de la antigua Iglesia de Nuestra Señora de Gracia, destruida por los franceses en 1818, de ahí el dicho popular de "Chinchón tiene una torre sin iglesia y una iglesia sin torre".
Mi siguiente destino fue Aranjuez, donde visité los exteriores de su Palacio Real, el cual no había vuelto a visitar desde el verano de 2001 cuando estuve trabajando en Madrid.
Con más problemas de los deseados por culpa del gps (los mapas no estaban actualizados), salí de Cuenca pasadas las 10:00 horas, por lo que salvo una breve parada en Carrascosa del Campo para echar gasolina, hice de una sola tirada más de 120 kilómetros hasta llegar a Valdelaguna (Madrid), desistiendo de hacer la parada que tenía programada a pocos kilómetros de Tarancón para visitar la Ermita de Riansares.
El motivo que me llevó a programar la parada en la Ermita de Riansares, era casi exclusivamente para, además de visitar la ermita, disfrutar de las vistas de las praderas, alamedas y pinares de su entorno mientras descansaba, sin embargo como he dicho decidí continuar la ruta sin detenerme.
A la salida de Tarancón, tuve irremediablemente que coger por la autovía A-3 (E-901) hasta llegar a Villarejo de Salvanés, donde pude abandonarla para proseguir mi camino hacia Valdelaguna por la maltrecha carretera M-316.
Al llegar a Valdelaguna, me encontré con mucha gente en las calles, había tanta que parecía una gran ciudad, algo que me sorprendió mucho siendo un pueblo de menos de 900 habitantes. De repente me encontré que la calle por la que debía de pasar estaba cortada al tráfico por un vallado a lo largo de toda la calle, comprendí entonces que estaban celebrando algún encierro, así que no me lo pensé ni un segundo y busque un lugar donde aparcar la moto para poder ver el encierro.
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| Vallado encierro de Valdelaguna |
Desgraciadamente había llegado demasiado tarde y acababan de finalizar, así que solo me dio tiempo a tomar un par de fotos antes de proseguir mi camino hacía Chinchón, a tan sólo 8 kilómetros de Valdelaguna.
En Chinchón volví a hacer una nueva parada para ver su Plaza Mayor, que en esta ocasión estaba dispuesta y preparada para los festejos taurinos.
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| Plaza Mayor de Chinchón preparada como Plaza de Toros |
De arquitectura popular, la Plaza Mayor es una plaza clásica de la Edad Media. Su forma es irregular y una estructura sencillas, con edificios de tres plantas, galerías adinteladas y 234 balcones de madera denominados "claros". Desde su construcción, en la plaza se han celebrado numerosas actividades: fiestas reales, corrales de comedia, corridas de toros, actos religiosos, políticos y militares, etc...
Desde la Plaza Mayor, también podemos ver la Iglesia de la Asunción y la Torre del Reloj. Siendo curiosa la historia que rodea a estos dos edificios, ya que por una parte la Iglesia de la Asunción nunca tuvo una torre campanario como cualquier otra iglesia y por otra parte la Torre del Reloj es lo que queda de la antigua Iglesia de Nuestra Señora de Gracia, destruida por los franceses en 1818, de ahí el dicho popular de "Chinchón tiene una torre sin iglesia y una iglesia sin torre".
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| Plaza Mayor e Iglesia de la Asunción en Chinchón |
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| Plaza Mayor y Torre del Reloj en Chinchón |
Mi siguiente destino fue Aranjuez, donde visité los exteriores de su Palacio Real, el cual no había vuelto a visitar desde el verano de 2001 cuando estuve trabajando en Madrid.
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| Palacio Real de Aranjuez. Frente a la Plaza de las Parejas. |
Como quería tomar algunas fotos más cercanas del palacio, entré con la moto hasta llegar a la Plaza de las Parejas, junto a la fachada sur del palacio y eso debía de estar prohibido, porque apenas me había dado tiempo a aparcar la moto y tomar un par de fotos, cuando salió un vigilante de seguridad para pedirme que abandonase inmediatamente el lugar donde me encontraba.
Después de la "bronca" que me echó el vigilante, me busque otra zona donde poder tomar algunas fotos más sin infringir las normas.
Cuando me disponía a continuar mi camino, recibí una llamada de mi hermano interesándose por saber dónde me encontraba y a que hora había previsto llegar a Olías del Rey.
Los últimos 35 kilómetros hasta llegar a Olías del Rey los recorrí en poco más de 30 minutos, con lo que antes de las 13:30 horas ya me encontraba "in the house of my brother", justo para tomar un par de cervezas en la mejor compañía.
Como ya conocía la ciudad de Toledo de un anterior viaje en septiembre de 2011, en esta ocasión optamos por pasar toda la tarde en la casa, hasta que ya por la noche quedamos con unos amigos de mi hermano y mi cuñada para cenar en Toledo.
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| Vista del Palacio Real de Aranjuez desde la Plaza de las Parejas. |
Después de la "bronca" que me echó el vigilante, me busque otra zona donde poder tomar algunas fotos más sin infringir las normas.
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| Vista del Palacio Real de Aranjuez |
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| Palacio Real de Aranjuez frente al Patio de Armas |
Cuando me disponía a continuar mi camino, recibí una llamada de mi hermano interesándose por saber dónde me encontraba y a que hora había previsto llegar a Olías del Rey.
Los últimos 35 kilómetros hasta llegar a Olías del Rey los recorrí en poco más de 30 minutos, con lo que antes de las 13:30 horas ya me encontraba "in the house of my brother", justo para tomar un par de cervezas en la mejor compañía.
Como ya conocía la ciudad de Toledo de un anterior viaje en septiembre de 2011, en esta ocasión optamos por pasar toda la tarde en la casa, hasta que ya por la noche quedamos con unos amigos de mi hermano y mi cuñada para cenar en Toledo.
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| Vista de la ciudad de Toledo (septiembre de 2011) |
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