En mi última salida en moto, sin saber todavía exactamente cómo, ni dónde, rompí el intermitente delantero derecho o más concretamente, el brazo que lo une a la moto.
Muchas han sido las veces que haciendo una ruta en moto he pasado delante de algún cortijo, hacienda o casa abandonada o en ruinas y sin embargo, nunca había sentido la curiosidad suficiente para detenerme a contemplarlos.